Momentos. El Hombre que corre
No son las siete aun, y estoy sentado en uno de los bancos piedra, o de concreto, de la peatonalizada calle del centro, una pléyade de personal que camina como si se fuera a acabar el mundo, lo cual, quizás sea verdad, aunque no creo que sea hoy, aunque si lo fuera, problemas que me …