Más poemas, de los que ahogan las penas,
que sopesan sentimientos y las condenas,
que muestran sufrimientos ocultos,
de los dolores, los insultos.
Poemas, escritos en tiempos turbios,
o en momentos tranquilos y suburbios,
escritos con la tinta que es amargura,
o el hidromiel de la dicha pura.
Poemas, líneas de dolores plenos,
de almas perdidas, en desvelos ajenos,
o de ansias ya sosegadas,
de inquietudes aletargadas,
o de turbaciones despiertas,
emociones que se muestran abiertas.
Alegrías y penas, en sus andanzas,
líneas de desesperanza,
de prisas con adulación ligera,
de detenciones con ojeras.
Líneas y renglones torcidos,
momentos intensos, vividos,
al borde del aguantar,
donde la vida empieza a temblar.
Indiferencia e indolencia,
amores y frustraciones,
dolores y múltiples sensaciones.
Poemas, siempre poemas,
donde todo lo que importa se quema.