De siempre, cuando veíamos a una chica muy delgada, o chico, o la comida era escasa, se decía “a eso no le saca un filete ni Sandalio el Carnicero”.
Pues bien, Sandalio, existió, fue un carnicero que de muchacho vino de Madrid a establecerse aquí, famoso por la calidad de su carne y destreza en su oficio, de tal forma que una prospera descendencia, continuó su oficio durante muchos años, la historia da para mucho, pero no quiero alargarla más.