
Hoy me he levantado un poco más tarde, si, son las cinco de la mañana, casi la hora normal de cualquiera que tenga la jornada completa, que quizás sea mi caso…, o no, ¿Qué mas da?, el caso, ese que refería, es que estoy un par de horas más tarde que lo habitual, ¿me he quedado dormido?, más quisiera, ha sido solo que he estado abstraído en mi propia cabeza durante dos horas, ya se sabe, que los desequilibrados como yo, dan mucho juego en eso de mirar la pared como si estuvieras viendo la tele.
Bromas aparte, hoy es de los días que realmente pocas ganas hacen de moverse fuera de casa, el frio que lo echa el agua, que ha venido de nuevo, cuando apenas se ha ido, y eso es bueno, siempre adolecemos de su falta, pero en el día a día la maldecimos, pues no somos zona en la que el agua sea algo tan común, esto no es el norte umbrío, sino un lugar al sol, siempre al sol, sin el cual, se nos pone una cara de mustios que da pena; aquí levantarse y ver el cielo lleno de nubes…, pues eso, que ya llevas el día atravesado, la quijada caída, y un humor, cuando menos tan sombrío, como el cielo que te cubre.
He puesto la tele, y para que se me ha ocurrido, me he dado cuenta, con dolor de estómago, de que estamos en el país de nunca jamás, donde nada es como debe de ser; me doy cuenta, aunque quiera olvidarlo, que el gobierno es el reflejo de los que los votan, y me he sentido rodeado de personas o similares con la cara como el cemento, egoístas, malvados, traicioneros, crápulas, puteros, ladrones…, basta ya, que lleno mil páginas con sus adjetivos, lo cierto, es que la he apagado, pues a cada momento, con la más mínima noticia, me sentía un poco peor.
¿Se puede llegar mas lejos en la falta de humanidad?, si, supongo, alguien te puede sorprender, pero en este país es difícil, el ladrón es el normal, y el que no roba es que no puede…, o que tiene algún desorden mental, porque lo de ser honrado, quizás sea el que está leyendo esto, pero si es así, estará usted en la más baja escala social, pues con la honradez, vienen muchos problemas, ¿ventajas?, que yo sepa, en este mundo, ninguna.
Que pena que tenga que hablar de esto, de que ya no quedan principios, que la lealtad, el amor incondicional, el sacrificio, sean cosas que son motivo de risa, yo me crie de otra manera, así me ha ido, pero ahora desde mi atalaya, con mis equivocaciones, creo que lo he hecho bien, espero que el que lea esto, piense lo mismo de su vida, ojalá, aunque…, a fin de cuentas, somos el legado de años de dejar pasar, que últimamente, pues, que la cosa se ha ido dejando demasiado, la triquina, se ha enquistado, ahora será difícil de quitar, cuando no imposible, y todos pensaremos en la frase, “madrecita, madrecita, que me quede como estaba”, pero si decimos eso, es que ya será tarde, pero me callo, que mejor callado, vaya a ser que despierte alguna conciencia con lo bien que duerme la conciencia española…, si queda alguna.
Este que lo es, se va colocar para ver las ventanas, aun cerradas, son, creo, mas inteligentes que la mayoría de personas que conozco, y de honradez y similares cargadas en comparación con el personal.
Es una pena, pero por desgracia, es cierto.