La luz, Vuelve la Luz (Rima)

La luz… vuelve la luz,

cuando ya no importa su cruz.

Cuando las sombras se alargan,

y la mañana aún no se encarga.

Recuerdos, solo de nada,

lagos de calma en su fachada.

Lejanos, vacíos, sin oleaje,

ni mares, ni sal en su paisaje.

Pájaros caen en el suelo,

sin fuerzas, sin anhelo.

Gritos que rompen el silencio,

ecos de un mundo sin aliento.

Enanos que fingen bravura,

temblando con dentadura.

Quieren ser grandes, valientes,

pero tiemblan entre sus dientes.

Horizontes de nubes negras,

que lloran penas ya tan viejas.

Se acercan, pesadas, rotas,

con sus lágrimas de derrotas.

Árboles muertos se alzan tiesos,

en huertos ya tan yermos, ilesos.

Donde la vida no quiso volver,

ni una semilla quiso nacer.

La planicie todo lo abarca,

hasta donde el ojo enmarca.

Donde debía crecer, no hay nada,

ni flor, ni hoja, ni alborada.

Ya no hay pájaros en el cielo,

ni criaturas que toquen el suelo.

Soledad que hiela, que ahoga,

en una tierra que ya no dialoga.

Allí donde mi vista alcanza,

ya nada queda, ni esperanza.

Suspiro con pena apagada,

pues tras la quema… no queda nada.

¿Qué fue antes de este desastre?

¿El país de los gigantes…

o la ruina que vino a castrarles?

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