
Es tristeza,
AlgEs solo tristeza,
un alma indefensa,
días que pasan
sin luz ni certeza.
Rozando el abismo
de la desesperanza,
cuando el mundo mismo
se vuelve balanza.
La vida me observa
con ojos vacíos,
y el día despierta
con gestos sombríos.
Edificios fríos,
manos sin vida,
colores perdidos
en tarde dormida.
El vaho difuso
nubla la escena,
en un vagón sucio
que rueda sin pena.
Todo se agita,
nada reposa,
la máquina grita
su marcha forzosa.
Trabajo maldito,
rutina sin fin,
olor marchito
que huele a ruin.
Rostros sin nombre,
silencios callados,
sombras de hombres
con sueños truncados.
Idas y vueltas,
fatiga y dolor,
no hay quien resuelva
tan hondo clamor.
Sin tregua ni pausa,
sin un aliento,
solo la causa
del triste lamento.
Y así la gente,
mansa y callada,
se entrega inerte
a su retirada.