Tardes de Paseo (Rima)

Tardes de paseo, brisa que abraza,

cuando la risa del niño arrasa,

cuando los parques en luz se enlazan,

y entre los árboles todo es bonanza.

La brisa besa cuerpos vencidos,

bajo ramajes mustios y heridos,

mientras la tarde se va extendiendo,

con paso errante, con ritmo lento.

Voces de jóvenes, dulces acentos,

llevan en brazos vidas y tiempos,

y entre pantallas que los dominan,

siguen hablando sin quien los mida.

¿Quieren acaso ser invisibles,

si nadie escucha sus voces frágiles?

No van al parque a ver el día,

sino a mostrarse en su agonía.

Creen que importan, que son más grandes,

pero son sombras de un mundo errante,

pobres muñecos, seres aislados,

vagan perdidos, siempre callados.

Mientras las voces de acentos lejanos,

pasean la vida con paso humano,

y entre los árboles, ecos del barrio,

siguen flotando, fríos, templados.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *