
Labios trémulos
Húmedos, abiertos
Senos prietos
Manos torpes
Calor sin freno
Amor de caliente vida
Senos de arco iris llenos
Besos de costura en tu cuello
Y abrazarte con si locos fuéramos
Apretarte hasta romperte
Hasta perder el aliento
Sentir por primera vez
Como se moldea con el tuyo
Mi ardoroso cuerpo
Besar ese cuello de cisne
Sentir tu corazón latiendo
Casi al son del mío
Que escaparse quiere
Noche clara de oscura calle
Amor de mano quieta
De basta que ya no puedo
De parar porque la quieres
De sonreírle en silencio
Y con todo el dolor del alma
Sonreírle y mentirle, diciendo
Estoy contento. Hasta luego.