El Cabito y la Coba

En el año de 1853 vivían en Córdoba dos mozos de esos que adquieren fama de valientes, y que no hay reyerta ni cuestión donde no se encuentren: eran conocidos por el Cabito y la Coba, y mediaba entre ellos una rivalidad que los había enemistado de un modo irreconciliable: una noche llegó uno de ellos á la taberna que hay frente á esta calle y era conocida por la del Postiguillo; puso una peseta sobre el mostrador, pidiendo un vaso de vino, cuando acertó á entrar el otro, no tardando en armar la cuestión de siempre, en que se dijo mediaban unas mujeres de vida licenciosa, y bien pronto salieron desafiados á la calle; mas el Coba, que era cojo, asió al Cabito de una mano, empezando ambos á darse puñaladas hasta el número de siete cada uno; el segundo, que tenía todas las heridas en el centro del cuerpo, quedó muerto delante de la casa núm. 3, y el otro, casi espirando, pues no llegó vivo al hospital, en la puerta de la núm. 1; la casualidad de haber llovido, tenía encharcado el arroyo, resultando un horrible lago de sangre que asombraba á cuantos lo vimos.