Ubicaciones de las Antiguas Ciudades en el Valle De Los Pedroches

Con respecto a las ubicaciones de las antiguas ciudades en el valle de los Pedroches, tal como se conoce ahora, y a mí me gusta llamar Fahs Al Ballut (el valle de las Bellotas), es un tema que ha hecho correr litros de tinta, o sudor de tecla, llevando a muy dignos pareceres que distan, cundo no entran, en colisión o colusión unos con otros.

El que me conoce, sabe que no soy persona reconocida por mis estudios ni nada similar, sea que soy, o quiero ser, un enamorado de esa singular tierra, por ello, apoyándome en mi pedestre inteligencia, nada digno de reseñar, bajo a tierra y utilizo lo que ha hecho al hombre progresar, la torpe lógica de andar por casa.

Mis preguntas podrán ser las mismas que insignes historiadores, mis respuestas, lo son en castellano, pues darlas en latín, o incluso griego, me parece más que pedantería, intento de cubrir con oropel, lo que no tiene esencia.

Vayamos pues a la respuesta de este pobrecito junta palabras. Realmente, a mí, colocar las ciudades en un sitio o en otro es tarea fácil cuando la información que se tiene, a más de difícil de contrastar, es además lata en cuanto a su exactitud.

Los antiguos viajeros, que no eran en su mayoría personas de academicismo laico, traían con sus relatos, los intentos de agradar, de vender, de sobresalir, tal como hacemos ahora, la vida no cambia,(si alguien así lo desea, lo puedo poner en latín); eran producto de su momento, de una situación política, ideológica o religiosa, que hacia engrandecer lo necesario por los poderes, así como denostar lo no deseado, de tal manera que dilucidar qué es lo que era el esqueleto de su descripción, es tarea, para mí, cuando no difícil, imposible.

¿Cuál sería la forma de poder saber, no con exactitud, pero sin crear elucubraciones?; para mí es fácil, los caminos, los medios de comunicación, sean fluviales, terrestres o cualesquiera que comuniquen grupos de población.

Me explico, podemos situar lo que queramos en cualquier lugar que deseemos, es fácil, pero para poder hablar de algo, debemos de pensar que los caminos, que nacen por necesidades militares, después son refrendados para su esplendor, y engrandecimiento, por el comercio que nace en la comunicación con el resto del imperio, región, país, o como lo que queramos llamar.

El comercio, es el que marca, salvo excepción, la grandeza de una ciudad, y este se realiza por medio de los caminos que comunican, como neuronas, unos lugares con otros. Esas rutas, son específicas, y cambian dependiendo de cada momento histórico, por lo cual, ubicar una gran ciudad sin un camino de entidad, sería un descalabro mental, (que los hay), pero, ¿Cómo poder saber qué entidad tiene un medio de comunicación?, vámonos a la lógica pedestre, sujeta a la más rigurosa invalidez absoluta.

La necesidad de proteger el comercio, la cantidad de lugares de defensa que custodiaban los caminos, la indispensable anchura y cuidado del mismo, y los lugares necesarios para el almacenamiento e intercambio de bienes y productos, así como el acomodo de viajeros, si, exactamente como ahora mismo.

Es por ello, que querer construir un aeropuerto sin viajeros, es colocar una gran ciudad en un momento histórico en el que no existía esa comunicación.

Otra de mis dudas nace, cuando se coloca una ubicación y esplendor dentro de un concepto lato, época romana, tardo romana,… no me vale, son cientos de años los que abarca cada una, y no es lo mismo hablar del año uno de nuestra era que del cien, aun siendo los dos son del mismo período histórico, pues la vida, solo cambia en el exterior, el ser humano es el mismo, y no puede estar quieto, por lo que los seculares caminos, nunca lo son, cambian al ritmo de la vida, y la vida, cuando es buena, es tumultuosa, y transforma continuamente todo lo que tiene alrededor.

Hemos encontrado la ciudad, ¿Cómo la llamamos?, me da igual, ¿está datada en el contexto histórico por medios que nos permitan afirmarla contundentemente?, mucho me temo que no, solo son conjeturas, con más o menos base científica.

Aun de las cosas buenas, o singulares de esta tierra, es que las rutas son más o menos definidas, tres principales, cada una con sus calzadas, con su consistencia a través de los siglos, pero que son cambiantes en importancia, por motivos políticos, militares, ideológicos, comerciales, y más, y a partir de ahí, dependiendo de esos factores, se extienden las ramas neuronales de la lógica humana de comunicación, y es de lógica, valga la redundancia, que lugares en los que poco ramal llega, intentar construir enormes ciudades es un cuento no oriental, sino chino. (No me imagino a los habitantes de la Córdoba Califal, saliendo de la Mezquita Alhama en fila india, por un camino de un metro de ancho, lleno de barro y baches)

Y cambia, dependiendo también del desarrollo de los cuatro puntos cardinales, que todos sabemos cuáles son, si vienen del norte, todo varia, si es del sur, otra voltereta; y por todas estas razones, caminos son olvidados, cuando otros son engrandecidos, y a su derredor, como un racimo de uvas, los frutos que cuelgan de ella, que, si son redondos, nos hablan del esplendor, y coloquemos allí algo de valor, pero si es pasa arrugada, no vendamos la capital de ningún imperio.

Todo esto viene a colación, de que esta zona, a mi entender maravillosa, es tan desconocida en aquellas épocas, ahora tan lejanas, que querer distraer la mente de aquellos que la amamos, montando espectáculos pirotécnicos sin base científica, es olvidarnos de lo que conocemos, y obviarlo, ¿sabemos a conciencia la época en que fue reino independiente, con sus reyes?, ¿que fue uno de los más tardíos en perderla, debido a la consistencia militar de sus moradores?, y cientos de momentos que la engrandecen y que se pierden en la conciencia colectiva, simplemente por el hecho de que la época, el contexto histórico en que se desenvuelve, no es oportuno en este momento.

Voy a contar un secreto, me toca los genuinos, que todo el mundo intente engrandecer algo con la esencia griega, ibera, visigoda, y por supuesto romana, cuando por realidad histórica, el período mas álgido de esta zona, como de la mayoría de la tierra que nos rodea, es el que corresponde a la época Hispano Árabe, pero no es de gusto, suena mal, es como mezclarnos con chuchos de calle, cuando no tenemos ya nada de esa sangre, por aconteceres históricos, siendo que en Galicia hay más genotipo árabe que en Córdoba, pero si nos queda ese trasfondo de grandeza histórica, de cuando fuimos la capital del mundo. Ahí queda eso.