La locura del mundo, miro a través de la sempiterna ventana, para poder captar algo de la realidad que me rodea, además de la calima africana, ya sabemos que de marruecos no viene nada bueno.
El caso es que esta neblina, se asemeja a la que tienes cuando te atiborras de opiniones de expertos, que te cuentan lo que ha sucedido, mientras ninguno, vaya a ser que acierten, te da la mas mínima solución al laberinto que nos rodea hasta asfixiarnos.
Demasiada información, mala información, lo que quieren que pensemos, no nos dan líneas, nos dan “TODOS ABSOLUTOS” que tenemos que tragar como las hostias en misa, “palabra de dios”, y así nos va, adocenados, sintiendo lo que otros quieren que sintamos, no sé, pero me parece que cada vez el llamado mundo libre es más bien un mundo alienado.
Historias que nos interesan, desubicadas, estupideces ensalzadas, minutos y minutos de espera ante lo que nos tienen que vender, “porque es necesario”, programas de opinión que apenas si pasarían el tamiz del analfabetismo más radical, eso sí, gente que ha hecho de la mentira, del sexo, del engaño, su forma de vida.
Bien es cierto que hay que ganarse la vida, pero, ¿tan bajo es necesario caer?, no lo sé, creo airear la vida privada de uno, no me parece que sea motivo de estipendio, aunque visto lo visto, si es rentable.
Y además ahoguémonos con los gurús de internet, los de Facebook, Instagram, YouTube, vaya pandilla, sálvese el que pueda, venden humo, muchas veces, demasiadas, venenos, y lo que me preocupa, es que los más jóvenes los siguen como borregos, triste futuro, aunque simplemente es la continuidad lógica del que tenemos, la muerte por tik tok, la violencia en video de millones de “me gusta”, pobre civilización que a golpe de estupidez va perdiendo el nombre, eso me hace recordar 1.984 de Orwell en el que los alienados, pedían “Soma, Soma”, la droga de la felicidad de los que nada valen, de los esclavos que no saben que lo son, y me pregunto, siempre me pregunto, ¿no será que lo que he comentado anteriormente es nuestro soma?