
Al sol del verano
Recoge tu pelo
Que lo acaricie
El sol
Que brille en tus zarcillos
Que se quede entre la tarama
Dibujando tu cuerpo
En la hierba hollada
Levanta la cara,
Y mírame
Para que con tu mirada
Estando a la sombra
Sienta el calor del sol
Reflejado en tus ojos dorados
Amada mía, llénate de calor
Brilla en la mañana
Y haz que el sol
Sienta de mi envidia
Al intentar abrazarte
Con su calor.
Porque sabe,
que cuando se vaya
A nada que lo haga
Serás mía,
compartirás mi almohada
Y mi cuerpo yacerá sobre ti,
Sin pedir nada
Solo tu belleza,
tu belleza callada
Tus labios abiertos rozaran mi cara
Y serás mi esclava, y también mi ama
Y rodaremos en la pasión
De un lado a otro,
Hasta quedarnos sin cama
Caernos al suelo
Y continuar la danza
De los amantes unidos
A los que nada separa
Y tú, sol, envidioso,
esperarás
A que ella salga.
Sabiendo, que tu calor,
Comparado con el mío
Con el que yo le ofrezco,
Apenas si es nada.