Soledades, Esperpentos

Soledades, esperpentos

Esperanza de seres muertos

Inquietudes, llantos, quebrantos

Aguas salvajes, remansos

Paces muertas, agónicas peguntas

Quieren ser preciosas, y no son nada

Preguntas a quien nadie responde

Desde que nace el día y la noche llega

Siempre la respuesta hueca, llena de nada

Más preguntas, oraciones, tratados, elucubraciones

Y de respuesta, como siempre, nada

Dedicar la vida, matar por la callada

Sufrir, padecer, partir, y la respuesta… nada

Alzar las manos al cielo, llorando por la llamada

De la que nadie oyó el sonido

Esa llamada, que, en el silencio de la respuesta, calla.

Y los ejércitos que en su nombre matan

Y los que en su símbolo se ensalzan

Continuarán esperando la respuesta

Y aún no han oído la llamada

Miran al cielo y esperan en medio de la matanza

la respuesta que no llega

bestias, creyéndose

elevadas en la llamada

cuando al fin…, no hay nada